Percibo el deceso de lo afable
la claridad de las mentes enfocadas
pero en todo cuanto sea vano,
todo lo efímero e irrelevante,
para jactancia de la historia.
Entonces fieles a lo unívoco
y orgullosos siendo artistas
hacemos época del huero
proyectando finales apoteóticos
que exterminan la hipocresía,
el laberinto hacia la verdad,
e inclinan nuestras impresiones
hacia alguna nueva utopía.